Como muchos recordarán, Lost fue considerada el primer fenómeno mundial televisivo mucho antes siquiera que imagináramos la existencia de la famosa serie The Game Of Thrones, y mucho menos que ambas tendrían un final decepcionante para una multitud de espectadores ocasionado por las malas decisiones de sus guionistas.
Con seis temporadas transmitidas desde el año 2004 hasta 2010 por la cadena ABC, Lost se convirtió en un gran éxito con una mezcla de drama, fantasía y ciencia ficción sobre las vivencias de los pasajeros supervivientes del vuelo 815 de Oceanic Airlines Sídney-Los Ángeles en una isla aparentemente desierta, en la cual comienzan a ocurrir eventos misteriosos e inexplicables.
Aunque Lost es recordada por ser uno de los espectáculos más interesantes de su época, igualmente lo es por haber dejado muchos cabos sueltos sin explicación. Antes de su muy debatido final en 2010, el programa fue calificado regularmente por la crítica como una de las mejores series de televisión de todos los tiempos. La primera temporada tuvo un promedio estimado de 16 millones de espectadores por episodio dentro de las fronteras de Estados Unidos.
Creada por J. J. Abrams y Damon Lindelof, Lost presentó una narrativa que se destacó por el brillante uso de las técnicas cronológicas como el flashbacks, flashforwards y flash-sideways, utilizados en pantalla para hilar un espectáculo multicultural con un elenco internacional. La temporada inicial tuvo el impresionante número de 14 personajes regulares que recibieron fama de estrellas.
Entre los protagonistas de Lost se destacaron el actor Matthew Fox quien interpretó a un cirujano con problemas llamado Jack Shephard. La actriz Evangeline Lilly personificó a la fugitiva Kate Austen. Jorge García dio vida a Hugo "Hurley" Reyes, un desafortunado ganador de la lotería. Josh Holloway fue visto como el estafador, James "Sawyer" Ford e Ian Somerhalder interpretó a Boone Carlyle, director de operaciones del negocio de bodas de su madre.
Aunque Lost siempre será descrita por numerosos críticos como una excelente serie, también hacen la acotación que su trayectoria fue manchada por su etapa final. Cuando comenzó a presentar una historia ya desgastada que culminó recibiendo comentarios muy negativos y decepcionando a sus espectadores, sobre todo al transmitirse su episodio final titulado "The End".
Las grandes dudas que generó el mundo paralelo que se usó durante la sexta temporada con el uso de los flash-sideways, constituyeron en gran parte las malas reacciones del público hasta el día de hoy. Tanto así que incluso se volvió una anécdota que aún se cita a modo de broma en otros programas o espectáculos. Se habla que los personajes terminan en un limbo o incluso, sin pies ni cabeza, de que los protagonistas estaban muertos desde el principio de la historia.
En respuesta a la negatividad alrededor de las escenas finales de Lost y a él compartiendo en varias entrevistas su decepción de que a los fanáticos no les gustara, uno de sus creadores, Damon Lindelof, tiempo después llegó hasta a pedir disculpas a los seguidores de la famosa serie por el controvertido, confuso y quizás no muy recordado final.
"No inventé la narrativa de que el final fue empíricamente malo, pero la amplifiqué".
Créditos: vader.news