Grey’s Anatomy se estrenó en el 2005 convirtiéndose en el mayor drama médico de todos los tiempos en la televisión. Actualmente se mantiene al aire con su décima octava temporada a través de la cadena de transmisión ABC, con una sólida base de fieles fanáticos que han seguido al programa durante su larga carrera, y que han sido testigos de enormes errores cometidos por los médicos que hacen vida en el hospital ficticio conocido como Grey Sloan.
Durante todo este tiempo, el éxito que Grey’s Anatomy ha logrado no solo se debe a sus fascinantes historias que involucran a cada uno de los personajes, sino también a la calidad de interpretación de sus actores. Sin embargo, eso no quiere decir que en las ricas tramas de la serie de larga duración en las que se han visto morir a una buena cantidad de pacientes, no se cometan errores, a pesar de que la producción del drama cuenta con asesores que son médicos en la vida real.
En este sentido, en su larga carrera Grey’s Anatomy muchas veces ha presentado en pantalla procedimientos médicos equivocados, que de cometerse en la vida real pondrÃan en riesgo la vida de los pacientes. Es por ello, que en reiteradas ocasiones la serie de ABC ha sido objeto de crÃticas por parte de verdaderos médicos, quienes han manifestado que el programa no es tan realista como aparenta ser.
Como los fanáticos recordarán, en una memorable escena de Grey’s Anatomy una paciente llamada Sylvia acude al hospital en busca de atención médica urgente, después de que un tenedor quedara clavado en su cuello. Ella, fue atendida por el personaje de Ellen Pompeo, Meredith Grey, quien no solo retiró el objeto de su cuerpo sin dañar la zona afectada, sino que antes ordenó realizar una resonancia magnética.
Si esta mala práctica médica cometida por Meredith Grey en la ficción de ABC hubiera ocurrido en la vida real, hubiese provocado la muerte de la paciente de forma instantánea, ya que el equipo médico con el que se realiza la resonancia está compuesto básicamente por un gran imán, y por tanto el tenedor habrÃa sido arrancado del cuello de Sylvia causándole daños significativos.
El argumento de aquella nefasta escena, proporcionó mucho dramatismo, sin embargo dejó en claro que Grey’s Anatomy no es realista en todo lo que muestra en sus historias, aunque trate de ser lo más auténtica posible. Sin duda, es un episodio memorable no solo por la singularidad del incidente que provocó el tenedor en el cuello sino por la improbable resonancia magnética ordenada por Meredith Grey.
Créditos: vader.news