Después de tres temporadas desgarradoras de hechos turbios, fechorías violentas y todo tipo de dobles tratos, es seguro decir que el drama criminal de Netflix, Ozark, es uno de los programas más oscuros que el gigante de la transmisión haya producido.
Ozark sigue a Marty y Wendy Byrde (Jason Bateman y Laura Linney), una pareja de Chicago que trasladan a su familia a las tierras salvajes de Missouri con la esperanza de lavar millones de dólares en efectivo del cártel de la droga y salvar sus vidas en el proceso. A medida que la serie ha evolucionado, también lo ha hecho la participación de Marty y Wendy en los tratos del cartel, con el impactante final de la temporada 3 de Ozark llevando a los Byrdes al borde del peligro.
Lo que está en juego es cada vez más grande, lo que significa que no habrá espacio para la luz en ese mundo peligroso que avanza. Cuándo se le preguntó sobre el aspecto oscuro del programa en una entrevista, el director de fotografía Ben Kutchins habló con franqueza sobre la paleta visual completamente apagada de Ozark y resulta que la oscuridad es en gran parte el diseño pensado para la buscarle tono sombrío a la serie de Netflix.
La razón por la que Ozark es tan oscuro es porque la luz tenue y los tonos azulados están destinados a reflejar el sombrío paisaje emocional y el peligro constante que rodea a la familia Byrde. Fiel a esa afirmación, la ola incesante de adversarios y obstáculos que amenazan la vida acecha dentro y fuera de la oscuridad de Ozark como criaturas de la noche sedientas de sangre.
Entonces, es natural que Jason Bateman y el equipo creativo de Ozark quieran imbuir ese mundo con tantas sombras y rincones oscuros como sea posible. Como era de esperar, Kutchins citó las obras de David Fincher (conocido por usar imágenes oscuras y paletas de colores apagados) y otras películas criminales modernas como influencias clave en la apariencia de Ozark.
Da la casualidad de que la iluminación en sombras de Ozark también está destinada a transmitir una representación visual más precisa del mundo real de lo que suelen buscar muchos programas y películas. Si bien Kutchins compartió que gran parte del aspecto característico de Ozark se logra en la cámara, admitió que también se realiza mediante una extensa corrección de color en la postproducción.
Independientemente de cómo los creativos de Kutchins y Ozark lo estén logrando, hay pocos argumentos para que las inquietantes imágenes de la serie logren el efecto deseado, reforzando dramáticamente la tensión implacable que rodea a los Byrdes, incluso si no siempre podemos decir lo que está sucediendo en la pantalla.
Créditos: vader.news