Protagonizado por Bryan Cranston y Aaron Paul, la famosa Breaking Bad se destacó con un magnífica historia interpretada por talentosas estrellas de la industria del espectáculo cuya excelencia generó dos derivados muy importantes que se encargaron de atar los posibles cabos sueltos que pudieran haber quedado, la película El Camino y la célebre serie precuela Better Call Saul actualmente aún en transmisión. Son muchos los detalles interesantes vistos en pantalla que todavía son motivo de interés entre sus fanáticos, uno de ellos se refiere al tiempo.
Desde el mismo momento en que Breaking Bad debutó fue notorio que se convertiría en un drama de culto lleno de giros y vueltas, además de toneladas de escenas sorprendentes en todo momento. La interesante historia del profesor de química Walter White quien terminó convertido en uno de los mejores productores de metanfetamina del mundo del narcotráfico, presentó una transformación tan impresionante en pantalla que casi pudo hacernos perder la noción del tiempo en que transcurre la ficción en las cinco temporadas, si no fuera por un pequeño detalle.
Estrenada en el año 2008 y finalizada en 2013, con cinco temporadas completas en pantalla mostrando el auge y la caída de su personaje principal, la cronología en que se desarrolla Breaking Bad es sorprendentemente corta, transcurre en solo dos años. Prueba de ello es que en el primer episodio vemos en pantalla la celebración del cumpleaños número 50 de Walter White (Bryan Cranston).
El cumpleaños de Walt fue el único marcador de tiempo legítimo que mostró la serie durante sus años de transmisión. Al evitar las fiestas familiares o las celebraciones anuales, el tiempo de vida de los personajes se hizo un elemento muy díficil de precisar para los espectadores. Sin ese tipo de episodios temáticos, el creador del programa Vince Gilligan se aseguró de que los espectadores estuvieran totalmente absortos en el arco del apacible profesor White convirtiéndose en el temible Heisenberg sin distracciones cliché de festividades.
La preparación para ciertos eventos en la serie fue posible gracias a la experiencia de Gilligan en sentar las bases en lo que respecta a la continuidad de la serie. A pesar de transmitirse durante cinco años, la cronología ficticia de Breaking Bad duró un total de dos años desde que Walter inicio en la distribución de las drogas, tomando en cuenta que la última vez que vimos al personaje ya convertido en Heisenberg celebrando una festividad fue cuando en el show cumplió 52 años.
Este elemento formó parte de la gran lista de movimientos inteligentes que hicieron los productores en Breaking Bad, conocida por estar llena de detalles y otras pistas visuales o referencias a lo largo de su transmisión en pantalla. Desde el simbolismo del color hasta las frases y los objetos, los escritores y directores contaron con sus fanáticos para captar pistas y hacer predicciones basadas en lo que vieron, como ocurrió con los cumpleaños de Walter White.
Créditos: vader.news